Podía tirar las muletas

13- Adresseavisen, 31. diciembre 1991

Un poco antes de las dos y media de la tarde de ayer entró Stig Kvernberg (26 años) domiciliado en Skaun, con muletas y cojeando a la habitación 209 en el hotel Royal Garden. Los dolores que había tenido en su espalda durante 14 años habían escalado, y como último recurso querría probar esto. Diez minutos mas tarde  Kvernberg bajó las escaleras del hotel con las muletas debajo del brazo.

El healer Halvard Nordfjaeran (34 años) originario de Frosta, ahora domiciliado en Nord-Aurdal, consiguió que la gente hacía cola delante de la habitación en el hotel en Trondheim el lunes. En un anuncio en Adresseavisen el sábado prometió mas o menos un milagro para gente que padecían de dolores de espalda. Y para Stig  Kvernberg lo que ocurrió era un verdadero milagro.

---- me di cuenta de que algo había cambiado cuando me levanté. La presión en los pies era distinto.  Ahora da gusto vivir comparado con como estaba al llegar aquí. Será interesante ver como esto sigue, dijo Kvernberg.

Último recurso

Desde que tenía 12 años ha tenido problemas con la espalda. En el último tiempo los dolores han ido de mal en peor. Médicos expertos aquí y allá se han dado por vencidos por buscar una explicación.

----- cuando los médicos no pueden hacer nada por mi, tenía que intentar algo yo mismo. Esta visita era el ultimo intento, dice Stig Kvernberg.  Asusta realmente a su compañera al salir de la habitación sin las muletas.

Halvard Nordfjaeran sostiene que la diferencia de largo de piernas es la causa de que muchas personas tienen dolores de espalda, caderas y pelvis. Su tratamiento consiste en hacer las dos piernas iguales de largo. Esto ocurre en el transcurso de muy poco tiempo solo mediante imposición de manos. Cuando Stig Kvernberg se puso en el banco terapéutico, podíamos ver que la pierna derecha era mas corta que la izquierda. En el curso del "tratamiento" parecía que las dos piernas eran iguales de largo.

Talentos especiales;

" lo más que he visto de aumento durante mi tratamiento ha sido de 3.5 centímetros. Pero lo mas normal es de 0.5 a 1.5 centímetros. La pierna crece tan rápido que es posible de verlo, afirma Nordfjaeran.

Era trabajador industrial en Tønsberg cuando, hace diez años, tenía dolores en uno de sus pies y puso sus manos encima del sitio dolorido. Entonces sintió como fluía calor de sus manos. Y en seguida se puso bien.

Texto foto
Stig Kvernberg de Skaun vino en busca de Halvard Nordfjaeran con muletas. Después de un tratamiento de algunos minutos era capaz de levantarse y salir de la habitación sin las muletas.

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